Los glucómetros son dispositivos pequeños y portátiles, ideales para monitorear los niveles de glucosa en la sangre en cualquier momento y lugar.
Además, son fáciles de usar, solo hay que obtener una pequeña gota de sangre mediante un pequeño pinchazo en el dedo con una lanceta y luego colocarla en una tira reactiva que va en el glucómetro.
En personas sin diabetes, lo ideal es que el nivel de glucosa se encuentre entre 72 y 99 mg/dL (en ayunas) o menos 140 mg/dL (si se ingirió alimentos). Por otra parte, las personas con diabetes suelen tener niveles de azúcar en la sangre entre los 80 y 130 mg/dL (en ayunas) y menos de 180 mg/dL (si se ingirió alimentos).
Además, si el nivel de glucosa en la sangre es 180 mg/dL o más se trata de un cuadro de hiperglucemia y si el nivel de azúcar en sangre es igual a 70 mg/dL o menos, es un caso de hipoglucemia.